martes, 14 de julio de 2009

AL RITMO DE LA CUMBIA NENA.Estrategias Políticas en canciones de las Kumbia Queers. (Tercera Parte)


4.¡Ándale güerita!, yo te arreglo el coche: identificaciones estratégicas en la chica de calendario.

Desde mi perspectiva (casi) todas las canciones de las Kumbia Queers cumplen con la estrategia anterior; sin embargo, existen las que rebasan esta estrategia, como la chica de calendario que se adapta a una identificación estratégica. Resulta pertinente enunciar lo que Preciado ha definido como identificación estratégica:
- Identificaciones estratégicas: Identificaciones negativas como “bolleras” o “maricones” se han convertido en lugares de producción de identidades que resisten a la normalización, que desconfían del poder totalitario, de las llamadas a la “universalización”... Hacen un uso radical de los recursos políticos de la producción performativa de las identidades desviadas. (Preciado, 2006:3,4)
Una particular característica de esta estrategia es que, una vez que el sujeto desvincule su identidad de los binarismos de géneros, puede comenzar a construir su identidad de acuerdo a sus propios parámetros. Por lo tanto, la identificación estratégica tiene que ver con la decisión de individuo y de qué manera éste encuentra en distintos medios aquello que puede servirle para su identidad. Hace como una especie de juicios de valores que le permiten seleccionar entre elementos útiles e inútiles para la construcción de su identidad.
Lo anterior podemos destinarlo a chica de calendario. Esta identificación permite que la voz dominante en la canción se “transforme” a una voz que bien, podría ser la de un mecánico/a. Es decir, por una parte podría enfocarme al posible cambio de voz “femenina” a una “masculina”, que tiene como consecuencia la conversión performativa de un mecánico y el contexto de un taller, dominado meramente por los hombres y que a su vez objetivan a la mujer (la chica de calendario) como un instrumento más. Tal como sucedía en la cumbia villera, solo que ahora se está dando ese nuevo orden (la des-identificación). Por otra parte tenemos que esta conversión no podríamos establecerla como la primera y única variante, ya que visualmente y de nuevo, vuelven a salirse de la construcción de género sobre lo que se debe o no debe hacer. De hecho, son mujeres que actúan de acuerdo a su género, pero no hacen lo que deberían de hacer, y precisamente esta discontinuidad en el deseo permite que se identifiquen, y en consecuencia, hagan un uso radical de los performativos de género.
Tales usos radicales encontrados en la canción, son los que ponen en duda el continuum sexo-género-deseo de la voz cantante. En primera instancia tenemos a la mujer convertida en un mecánico, que se erotiza por la imagen de otra “mujer”. A su vez él o/y la mecánic@ adopta un lenguaje que hace referencia a un estilo de definir la masturbación “masculina” que, finalmente, es una sensación que le provoca la imagen de la “mujer”. Esta imagen se está usando como un objeto de deseo: un lubricante traes en la mano,/ me cae de madre que te lo quiero embarrar/ y el mes de enero y el de febrero/ y todo el año me la voy a chaquetear/ (Kumbia Queers, chica de calendario).
Esta idea presente acerca de la mujer como objeto de placer sexual, a partir de la perspectiva determinada de la cantante, se deja ver en el coro de la canción. Recita un sentido de propiedad al sustentar que, de manera repetitiva, la chica solo a ella le pertenece: ella es mi chica de calendario,/ de un lado a otro, nada ha cambiado/ella, ella es mi chica de calendario/ es un oasis cuando arreglo carros (Idem). Entonces la voz escoge algunas características masculinas y las convierte en parte de su identidad.

jueves, 9 de julio de 2009

AL RITMO DE LA CUMBIA NENA.Estrategias Políticas en canciones de las Kumbia Queers. (Segunda Parte)


La interpretación de la Isla con Chicas


La isla con chicas empieza por poner énfasis en un lugar llenos de mujeres hermosas (recomendación del principio). Este va a ser el motivo detonante que de paso al resto de la canción. La voz estará en constante búsqueda de esa isla con chicas, que en un primer plano, brindan la idea de un aislamiento. Al mismo tiempo va a conjugar el sonido cumbianchero, con el sol y el mar que dan la sensación de un ambiente tropical al mismo tiempo que romántico. Por lo tanto ese lugar lejano será el pretexto para que se desarrollen características constantes de atracción hacia personas de su mismo sexo.
Con anterioridad aporté que esta canción era un cover de la Isla Bonita de Madonna, y esto resulta demasiado interesante si hacemos una comparación con la muerte de Madonna de Pedro Lemebel. Sin embargo, el enfoque no va por comparar personajes, sino por el “loco afán” de la multitud queer por la apropiación de esta cultura pop (Esta es propuesta de
Iván Vázquez). No obstante, no solo habría que considerar a Pedro Lemebel, ni a las Kumbia Queers, también podríamos brindar ejemplos de canciones de Gloria Trevi y Mónica Naranjo (recordemos las epígrafes de Madre-Perra). Todos me miran y sobreviviré, respectivamente.



La interpretación de la chica de calendario


Esta canción construye a la voz cantante con la identidad de un mecánico ubicado en su taller de trabajo. Se trata del enamoramiento imposible hacia las chicas de calendario que, particularmente, los mecánicos, cantineros, albañiles, carpinteros, -hombres en su mayoría- colocan en las paredes de sus lugares de trabajo. Del mismo modo, la voz cantante nos cuenta las fantasías que les gustaría cumplir a partir de la configuración de la chica. Hay un manejo de la imagen de la chica, como una constante, es decir , un ser que permanecerá con las mismas características por todo un año, y que a fin de cuentas se convierte en una ilusión ante un “desierto” de carros. Es interesante la manera en la que la voz erotiza la imagen de la chica, aún cuando sabe que se trata de un simple papel en la pared.


Chicas que van en busca de chicas: Des-identificaciones.


Beatriz Preciado propone a la des-identificación como la primera estrategia política, en la que se empieza a dar un nuevo orden, así como una autoexclusión de los binarismos de género. Preciado se refiere a la des-identificación de esta forma:
Des-identificación. Surge de las bolleras que no son mujeres, de los maricas que no son hombres, de los trans que no son ni hombres ni mujeres. En este sentido, si Wittig ha sido recuperada por las multitudes queer es precisamente porque su declaración “las lesbianas no son mujeres” es un recurso que permite combatir por medio de la des-identificación la exclusión de la identidad lesbiana como condición de posibilidad de la formación del sujeto político del feminismo moderno. (Preciado, 2006:3).
Antes que nada, es necesario tomar en cuenta la reflexión sobre el género que hace Judith Butler: una construcción cultural establecida a partir de un continumm que se establece como un orden obligatorio que da como resultado la heteronormatividad, la imposición de un comportamiento considerado “normal” para la sociedad. Dicho continuum que da como resultado esa imposición es el de Sexo-género-deseo. También hay que resaltar que esta heteronormatividad puede ser transgredida por los individuos en la construcción de su identidad de género.
Ahora bien, lo anterior lo aplico en la interacción voz-letra la cual en un primer acercamiento, también exige la des-identificación. Sí la voz es la de una mujer (Juana Chang) que cumple con la continuidad de género al ser performativamente “femenina”, pero la letra de la canción es dedicada para mujeres, entonces esta interacción rechaza el deseo que iría de acuerdo a esta continuidad y, en consecuencia, abraza una discontinuidad que da como resultado esta des-identificación, se empieza por dar un nuevo orden. Este orden se establece a partir de la interpretación, debido a la condición externa que las hace rechazar los binarismos de género, se autoexcluyen.
Sin embargo, mi propuesta de des-identificación no sólo se basa en esa interacción. Los elementos de aislamiento también me hacen pensar en esa autoexclusión. Para empezar se trata de una isla que se encuentra en un lugar lejano, y el deseo por ir a ese lugar es por parte de la voz cantante-mujer, quien ansía encontrar ese sitio donde habitan otras mujeres que tienen la misma finalidad. El anhelo de ese sentimiento de búsqueda, se considera como un mero pretexto para alejarse del “mundo oficial”, en el que la heteronormatividad es esa “gran emperatriz”. De esta manera vuelven a des-identficarse, para establecer un nuevo orden en ese sitio aislado, que finalmente deja fuera a ese “mundo oficial”: Anoche una mina en San Telmo/me recomendó un lugar sensacional/lleno de chicas bonitas,/ yo ya quiero estar ahí,/lejos de aquí/una isla tropical,/todo lindo y natural/ahí es donde quiero estar/llévame a esa isla/ (Kumbia Queers, Isla con chicas). Se empieza a formar una identidad fuera del orden social, y la diferencia establecida como una sola en una minoría, se empieza tornar como una multitud.

AL RITMO DE LA CUMBIA NENA.Estrategias Políticas en canciones de las Kumbia Queers. (Primera Parte)


La cumbia Villera como influencia de las Kumbia Queers


Este género particular de la cumbia, básicamente pertenece al mundo de las “villas de emergencia”, mundo que se caracteriza por ser de un nivel socio-económico bajo, principalmente en Argentina. Hay demasiados grupos que manifiestan este género; sin embargo, solo mencionaré algunos que suelen ser los más conocidos como Yerba Brava, Los Pibes Chorros, Damas Gratis, Metaguacha, entre otros también importantes.
La cumbia villera se empieza a revelar como tal en 1996, y las temáticas que manipulan en sus diferentes canciones abarcan situaciones de drogadicción, cárcel, borracheras, negros, el robo como principal actividad para obtener materiales, el preso que se convierte en un héroe tan solo por regresar de la cárcel. Son diversas las temáticas que se tratan, una de las más importantes para la finalidad de esta entrada es la configuración que hacen de las mujeres. Este aspecto lo retomaré más adelante, después de enunciar las características del hombre villero propuesto por Catalina Sosa en Cumbia Villera ¿Fenómeno popular?
El villero se presenta como un estereotipo que se alude como un “negro, sucio, drogadicto, vago, peligroso, borracho, ordinario y matón” (Sosa, Catalina, Cumbia Villera ¿Fenómeno popular? http://www.elortiba.org/cumbiavi.html, consultada el 27 de abril de 2008). Estas características son muy notorias en cualquiera de las canciones de los grupos mencionados con anterioridad. Proporcionaré algunos títulos para sustentar lo dicho: Alma Blanca de Metaguanche, Los dueños del Pabellón y el fumanchero de Damas Gratis. La primera tratará sobre el uso del apelativo “negro” como reacción ante una situación que lo denigra como tal; en la segunda resalta la temática relacionada con el prisionero reprimido que cobra autoridad al estar en la cárcel; la tercera nos revela la necesidad del uso de drogas.
Ahora bien, lo que a continuación acontece es la configuración de la mujer en la cumbia villera. Básicamente es una mujer objetivada principalmente por la letra de cantantes hombres heterosexuales, es decir, la voz femenina está reprimida al presentarse como ausente. Ergo, La mujer se convierte en deseo sexual. Al ser una mayoría de intérpretes heteronormativos construyen a las mujeres como seres con los que pueden mantener relaciones ocasionales, “son mujeres traicioneras, infieles, mentirosas; están cosificadas, no se les rescata ningún valor y se las trata como un objeto. A ellas les interesa el sexo por placer, no está asociada al sentimiento”. (Idem: http://www.elortiba.org/cumbiavi.html, consultada el 27 de abril de 2008). Por lo tanto, el deseo sexual de las mujeres está determinado por el punto de vista del hombre, y al mismo tiempo está adiestrado a otros hombres con el objetivo de estimular la excitación sexual, tal como lo describe Aparicio:
El deseo de la mujer (en algunas canciones de salsa) está lejos de ser su propio deseo. Es una sexualidad impuesta desde afuera, desde la sensación de poder que tiene el hombre, sobre el cuerpo, l identidad y la vida de la mujer. Mientras el deseo femenino es aludido, no es nunca autodefinido, está siempre marcado por la ausencia de cualquier voz femenina. El deseo masculino, por el contrario, está sobredeterminado. ( Aparicio,1998:29)
Después de haber aludido a las características principales de la cumbia villera, es oportuno insinuar que hemos citado todos estos aspectos con la finalidad de vincularlos a las Kumbia Queers. El vínculo de la cumbia villera a la banda, consiste en amenazar como una influencia más en su música, y es posible afirmarla debido a la gran aceptación que ellas tienen por grupos de este género (Los Pibes Chorros y Metaguache). Sin embargo, la influencia que rescato de este género en la banda, es la relacionada con las mujeres. En un primer acercamiento tenemos que no se trata de cumbia villera, pero tienen atribuciones de ésta. Las Kumbia Queers serán las portadoras de voces que al menos, en lo villero, se presenta como hombre meramente heterosexual.. Lo importante de este apartado es dar a conocer el vínculo de preponderancia existente.


De forma breve y para contextualizar el análisis, voy a tratar la diégesis de las canciones, es decir en esta parte se condensa la interpretación de las mismas. Posteriormente se aplicarán las estrategias políticas y se tomarán los fragmentos de las canciones para sustentar dichas políticas.